CAMINAS O REVIENTAS
Todos los caminos llevan a Granada, y si los haces en silencio, conectado y mirando hacia dentro, te llevan donde tú quieras, donde tú sientas, donde tú ensueñas. A veces, después de bucear en el bunker de los residuos tóxicos encuentras más verdad y más propósito que en tu propio nombre, con el que un día se te etiquetó sin preguntarte, para transitar con el acuestas por este incierto y encasillado mundo. Este dejarse abrumar o embelesar por lo que surja es auténticamente mágico, esclarecedor y sanador a partes iguales. Cuando eliminas los filtros y te atreves a quitarte la careta lo que queda es lo que eres, pura esencia, y ahí, ante semejante desnudez lo que se aparecen en mitad de la noche son respuestas y no fantasmas.
Cuando desde fuera se oye, que no es lo mismo que se escucha, que el "Camino" te cambia, transforma o despeja la vida, solemos mirar al emisor con cara de incredulidad, reacción por desconocimiento, o quizá por tremebundo miedo a verse tan fuera de la zona de confort que nos acabe gustando y tengamos que empezar con la cuenta a cero.
En mi caso, cada vez que me escapo a la montaña, algo de esto me traigo, pero claro, esta vez ha sido muy bestia, ha sido muy intenso, ha sido muy extenso. Me llevo certezas que andaban revoloteando por el estómago, me llevo un poquito más de mi y mejor conmigo, me llevo un par de escalones en esto de jugar a intentar ir creciendo, pero sobre todo, me llevo respuestas, ecuaciones resueltas desde la calma, desde la claridad y la lucidez mental que te regala la senda y desde el atronador silencio que todo lo cuenta.
Me encantaría poder transmitiros todo esto que voy sintiendo con palabras, pero no alcanza, aun así, puede que tengamos una mejor bala, dar y recibir amor... ¿De eso se trata no?
Se vienen cosas...
Por cierto, hoy rememoré comer como lo hacía en casa de mis abuelas, gracias Carmiña, bendita calidez, benditas manos para la cocina, bendita vitalidad, benditos 90 años y bendita es ti entre todas as mulleres.
Rinconcito encantador con el mismo mobiliario de hace 70 años, calidade.
Menú do día, da noite y para un par de vidas...
Eso que ven en la foto, es el entrante, aun faltaba el primero, el fuerte...y el postre.
En Galicia, o caminas, o revientas...
Qué maravilla Jorge!! Y que bonito escribes y describes.
ResponderEliminar😊💜 gracias!
EliminarMe encantan las fotos, la de Grana es un puntazo y ponerle cara Carmiña también 💪
ResponderEliminarNO ME CANSO DE LEERTE!! 🥰
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